viernes, 3 de septiembre de 2010

Hace ya mucho que no te escribía.

Espero te encuentres bien por que la verdad mis mejores deseos están contigo, y nunca me ha gustado mal gastarlos. Espero también que todo marche bien por esa cabeza tuya tan llena de inmoralidades como de pensamientos profundos, ya no recuerdo la última vez que una persona me pregunto como estaba y se intereso por la respuesta.

He tenido bastantes inconvenientes en escribirte esta carta, por aquello de que me dicen que ya no me conoces y que quisieras reestablecer una amistad. La verdad no se que ha pasado pero quiero ahora contarte una pequeña historia. De esas que siempre te gustaban y que te llenaba tanto de alegría que comenzabas a aplaudir a la menor pausa.

“Érase una vez una familia llena de putas, en donde el dinero nunca faltaba y nunca sobraba; pero ellas siempre querían algo nuevo y sobrecogedor que les llamase la atención. Las putas eran 5 hermanas que, aunque se parecían demasiado, tenían sus rasgos característicos que ayudaban a diferenciarlas: la mas hermosa y la mas tonta de todas se llamaba Belleza, ella nunca era descuidada, ni mucho menos desarreglada, todo lo hacia con la justa medida y siempre andaba tras aquello que le luciera mejor. No había vestido que le hiciera justicia a su sonrisa; pero tampoco había oído merecedor de aquel insulto que era oírla hablar.

Recuerdo una vez cuando todos estábamos reunidos en el pequeño pueblo de Forresthide y dichas hermanas fueron invitadas a la celebración de año nuevo que allí se llevaba a cabo. No falta decir que todas las miradas se centraron en ellas por su exquisita apariencia; pero en el momento que entro Belleza al recinto se robo todas las miradas y los suspiros de envidia. Los hombres querían estar a su lado, las mujeres querían encontrarle algún defecto y los niños se quedaron embelesados frente a tal hermosura. No faltaba mucho para la media noche cuando Belleza, hablando de cualquier banalidad, hace un comentario respecto al anfitrión de la fiesta refiriéndose en lo muy incomodo que fue cuando este le confeso que sufría de disfunción eréctil y que solo le había pagado y subido con ella al cuarto para guardar apariencias. Las risas no estallaron, las caras de las mujeres enrojecieron, las dudas de los niños revoloteaban como gallinas asustadas, la cara del dueño de casa palideció a tal punto que el blanco mármol se vio rojizo frente a estupefacto rostro.

La incomodidad de sus hermanas no se hizo esperar y frente al iracundo; pero pálido, además de sudoroso, rostro del anfitrión ellas partieron inmediatamente hacia su hogar. En el camino venían discutiendo de lo inapropiado que fue el comentario y de que nunca mas las invitarían a un evento social importante, lo que le dolió mucho a Belleza ya que a ella nada le incomodaba más que el no poder esbozar una sonrisa en un lugar inundado de gente.

La primera en poner en marcha un plan fue la hermosa Inteligencia, la frágil y ponzoñosa Inteligencia, era la peor de todas ellas. Inteligencia era la típica mujer capaz de hacer lo que sea por conseguir lo que necesita. Aparte de suspicaz era también muy incrédula, lo que le daba cierto aire de respeto entre las personas del pequeño pueblo de Forresthide. Cada vez que alguien decía un comentario ingenioso todos miraban directamente a los ojos de Inteligencia esperando con ansia una de sus cínicas y populares respuestas. Ya más de una vez algún gran profesor que pasaba por la región tuvo que abandonar el pueblo por el ridículo que sentían cuando Inteligencia les respondía sus extrañas teorías.

El plan de Inteligencia parecía lo más adecuado en el momento. Su plan consistía en hacer una cena e invitar a su avergonzado ex–anfitrión y hacerle pasar una noche llena de “satisfacción” para así mirar si se podía curar del todo su mal y resarcir el error cometido por su impetuosa hermana Belleza.

El plan parecía sencillo; pero la primera en reprochar al respecto fue Sensatez, la hermana del medio. Sensatez era la encargada de todo con respecto al hogar y sus menesteres, era la mas alta de todas, con los ojos mas puros y cristalinos que puedas encontrar, siempre vestía de manera sencilla, era la más delgada de todas. Sensatez también era la encargada de cuidar a sus pequeñas hermanas y estar al pendiente de sus clientes y sus formas de pago. 

Ya recuerdo yo la vez que un acaudalado granjero de la región se quedo sin dinero en la casa de las hermanas y prometió pagar con 2 de sus mejores vacas a cambio de una noche integra con Belleza. El trato se llevo a cabo pero al final de la semana el Granjero no llego con lo prometido y cuál fue la sorpresa de este al levantarse una mañana solo para encontrar en su puerta una nota escrita por la mismísima Sensatez que decía: “me lleve tres vacas ya que en ningún momento estaba estipulado un retraso en el pago, y no se preocupe ni su mujer ni su madre sabrán de esto mientras no reporte las vacas como perdidas.”

Sensatez había encontrado un defecto en todo este plan y era el hacerlo sin que nadie del pueblo se enterase, ya que después habría muchas cosas por explicar, y ellas no podían darse el lujo. La rápida mente de Inteligencia dio con otra salida ingeniosa y muy audaz. Invitarían a los dos hijos mayores y después de emborracharlos un poco, llamarían al padre a que pasase a recogerlos y así podrían actuar entre todas.

Sensatez no tuvo objeción alguna sobre la segunda propuesta; pero si se preguntaba el como haría inteligencia para que los hijos mayores viniesen por voluntad propia a su hogar. Inteligencia ya tenia todo tramado para que sus hermanas colaborasen a la causa, incluyendo a sus dos hermanas menores. Pasión y Lujuria, dos hermosas gemelas con muy pocas cosas que la distinguiese una de otra.

Pasión y Lujuria son dos esbeltas muchachas con una gracia única, siendo las menores tenían ese encanto juvenil y ese tono en la piel que despierta carnales intensiones en los hombres a su alrededor. Más de una vez el señor SaintCrois, el sacerdote del pueblo, fue hallado mirando con apuro a este par de hermosas hermanas. Sus cabellos rubios combinan perfectamente con esos blancos rostros de porcelana, adornados con esas rojas mejillas y esos espectaculares pómulos. La única diferencia notable entre Pasión y Lujuria es su forma de hacer las cosas. Mientras Pasión es más controlada, no sin ser emotiva, y mucho más paciente. Lujuria es totalmente apresurada y desenfrenada, su carácter extrovertido la hacia pasar noches enteras con el mismo cliente.

Pasión es mas calculadora y mide muy bien los momentos precisos, realmente se dedicaba poco al oficio, solo lo suficiente para pagar sus gastos. Mientras que Lujuria era la más activa de todas. Aunque ahora que lo pienso mas de una vez debió darse el caso de clientes buscando a Pasión y siendo atendidos, sin saberlo, por Lujuria.

El nuevo plan de Inteligencia consistía en que las gemelas, Pasión y Lujuria, llegaran a la carpintería del pueblo, donde trabajan los hijos de nuestro impotente personaje, y comentarles de una daño ocurrido en el techo a causa de la tormenta de hace un par de días. Tal cual hicieron las hermosas, jóvenes y gloriosas gemelas. Al llegar a la casa de las 5 Hermanas los recibió Belleza diciéndoles que si podrían esperar un poco, que sus otras dos hermanas se bañan en estos momentos y el techo dañado es precisamente sobre el baño.

Los jóvenes tras sonrojarse un poco, al imaginarse a la hermosa inteligencia desnuda y la sagaz Sensatez enjabonándola, tomaron asiento guiados por las gemelas y seguidos de cerca por la imprudente belleza. Después de un rato al bajar las otras dos hermanas, en toalla y con una botella de licor añejo. Les brindaron un poco de vino, algo de queso y unos mendrugos. Los jóvenes ya estaban a medio vestir y disfrutando de caricias indiscriminadas. Al entrar un poco la tarde ya los jóvenes no tenían noción de sí mismos. Por lo cual Inteligencia mando a Sensatez a buscar al padre, advirtiéndole que por nada del mundo dejara que se metiera su mujer.

Todo pasó justo como Inteligencia había previsto. Sensatez fue en busca del padre de los muchachos y al llegar fue recibido por la mujer del susodicho: “¿qué haces en mi casa a esta hora?!!!Puta¡¡¡.” Dijo la mujer con una cara de agresividad tremenda. “¿No te basta la pena que nos hiciste pasar?”. Sensatez sonrió y dijo: “Señora no vengo a buscarla a usted, vengo por su marido. Quiero que pase a recoger a los borrachos de sus hijos y usted no debería ir señora mía, mi casa no es un lugar para mujeres tan decentes como usted.” El marido sonrió y dijo que Sensatez tenia total razón: “¿Que van a pensar si te ven allá? ¿que estas rebuscándote una buena noche?”

El marido fue en busca de sus hijos y al llegar todas las hermanas cayeron encima de él. Las caricias volaban, los besos eran desenfrenados y ese tímido olor a mujer le hizo sucumbir rápidamente. Después de unos cuantos juegos, llegaron a un acuerdo. El ex anfitrión de la fiesta dijo que todo quedaría saldado si pasaba una noche entera con las gemelas: Pasión y Lujuria. Así se llevo a cabo. Subieron al segundo piso y, tras cerrar la puerta de la habitación, los placeres no se hicieron esperar, la desnudes era el plato de la noche y no pensaba pasar desapercibida.

En esos instantes oyeron un fuerte ruido en la parte baja de la casa, los gritos del resto de las hermanas aturdían los oídos. Cuando las gemelas reaccionan se levantan espantadas, entra la mujer con revolver en mano y lanzando maldiciones. A una de las hermanas la empuja por una ventana y la otra le dispara en el pecho.

Pasan los días y después del entierro de una de las gemelas. La gemela herida se levantaba muy aturdida. No podía diferenciar a nadie en la habitación, no podía diferenciar el reflejo de su rostro, no podía siquiera pronunciar su nombre. Sus hermanas, angustiadas frente a tal desdén, llegan a la conclusión que inspeccionándola cuidadosamente podrían distinguir cual de las gemelas era. Después de la exhaustiva pesquisa no pudieron hallar nada. No pudieron descubrir ni la más mínima pista de cuál de sus hermanas se encontraba frente a ellas.

Desde entonces, por los celos de una mujer, ni la Belleza, ni la Inteligencia, ni la Sensatez han podido descubrir la diferencia entre la Pasión y la Lujuria.”
Con esto espero que recuerdes algo y que, muy pronto, tenga noticias sobre tu mejoría. Te quiere al borde del desquicio tu amigo que te ama.

1 comentario:

  1. Me encanto.. me tuvo cautiva todo el tiempo.. y el final un poco estremecedor, llego rápido y certero.. me dejo con ganas de mas.. por q esas 5 mujeres y por esas mismas 5 mujeres, mas q ellas, todo el pueblo estaría en peligro de muerte!

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